7° Festival Nacional de Circo Callejero

🕔 29 de Marzo de 2017

Del 23 al 26 de marzo se realizó el 7° Festival Nacional de Circo Callejero en Laprida. Con gran presencia de público y artistas de primer nivel.

          Convertido en punto de referencia dentro del circuito de festivales y espectáculos de calle, el 7° Festival Nacional de Circo Callejero de Laprida, crece año tras año.

         Con la misma calidad de espectáculos desde sus inicios, llevados adelante por las mejores compañías de circo de nuestro país, con artistas que han realizado presentaciones por todo el país, y el mundo, y la recuperación del espacio público para el disfrute de los niños y en familia, el Festival de Circo de Laprida ya hizo su huella.

         Pibes, con sus padres, tíos, abuelos, la familia, y el mate y los bizcochos, colmaron la Plaza Central el jueves 23 y viernes 24, con los Talleres, que tuvieron juegos, malabares, clavas, y tela. Y también la exhibición de trapecistas. Dos jornadas a pleno sol.

         Creado por el Gobierno Municipal es Festival crece también en público; y alrededor de 350 niños pasaron por los talleres participando y compartiendo nuevas experiencias junto a los artistas. En esta edición se presentaron las compañías de artistas callejeros: en este festival se presentaron las compañías y artistas callejeros Brunitus, Crazy Mozarts, Cia. Simpañia, Zia e Nipote, Mina, Polimatas, Dúo un pie. Y cuenta con la coordinación artística de los artistas callejeros Roque Niklison y a Dolores Ruiz.

         En siete años casi 60 compañías de circo han pasado por Laprida con sus espectáculos.

         El sábado 25, a las 16.00 horas, en una tarde soleada y un cielo azulado, en el escenario ubicado en inmediaciones de la fuente macetero, Brunitus fue el encargado de la apertura del festival, y ahí nomás, dejó explicitado, un modo de vida y de llevar el arte a cada rincón: “Yo tuve un sueño, dijo, y es viajar llevando mi arte a todo el mundo, y hoy ustedes son una parte de ese viaje”. Un espectáculo para toda la familia que propuso un viaje por los sentimientos: los diábolos girando, en un vuelo que enreda y desenreda las historias.

         Luego siguió el turno de Crazy Mozarts, un dúo que se las trajo, con su ácida comicidad, la morisqueta a flor de piel, y el cuerpo en toda su expresión, y la música ambientando, un original concierto de música clásica interpretada con instrumentos insólitos de la mano de dos locos excéntricos. Un espectáculo lleno de humor y circo, donde nada es lo que parece. Inspirado en el cine mudo y los dibujos animados, el público fue cómplice de esta sinfonía de gags, situaciones absurdas y números de circo de alto nivel. En la improvisada pista frente al Palacio Municipal, hubo risas y asombro asegurado con estos dos payasos que harán lo imposible por sobrevivir a este caos musical.

         Tras ello fue el turno de Polimatas que desde su trapecio y sus artefactos de vuelo brindaron una maratón de piruetas en el aire; al igual que Mariel en su tela. Y el cierre de la jornada llegaría con la Cia Simpañía. Harry, Peperina y Jacinto fueron una mezcla explosiva de diversión y asombro; una acróbata, que no quiere presentarse en público, y dos payasos que hicieron hasta lo imposible para poder continuar con el espectáculo ya que ella es la estrella del show.

         Estuvieron de invitados especiales: el grupo de percusión Los brujos de Conga Congo, la Batucada Trula Lá y la comparsa de niños y padres la biblioteca Mempo Giardinelli. También en la Plaza estuvo presente el Mercado Productivo Artesanal que es impulsado por el Gobierno Municipal, a través de la Subsecretaría de Desarrollo Económico, Producción y Empleo. Y también los stands de venta de la Promoción 2017 y la Subcomisión de Cestoball.

         Domingo 26. El cielo gris, y las nubes que rondaban, dando vueltas y descargando una leve llovizna, intermitentemente. El inicio de esta segunda jornada vino de la mano de Zia e Nipote, un dúo que despertó las risas de todos. Comedia circense para toda la familia: una tía y su sobrino que hicieron emocionar, reír y sorprender a través de las diferentes rutinas del circo: malabares, equilibrios, acrobacia aérea.

         Y luego continuó con la presentación de Mina, que tuvo la especial participación de un integrante del público, que con toda su buena onda, se predispuso a sumarse espontáneamente al espectáculo. Pícara, ocurrente y sensible, Mina contó una historia con gestos de comedia que hizo reflexionar, y con un convencimiento: el amor cambiará al mundo.

         Se descargaban, para este momento las primeras gotas, pero todos los presentes miraban el cielo, pero no hacia las nubes. Es que nuevamente el combo de trapecistas Polimatas activó su número de vuelos en la Plaza Central. Desde los parlantes una potente voz de capitán de a bordo, invitaba a vivir el viaje. Un número de alto nivel.

         Tras ello, la lluvia obligó a trasladar el escenario al Gimnasio de la Escuela Media. Donde el público se dispuso en una pista semicircular, a la espera de que los artistas volvieran a escena; como si nada hubiera alterado la magia del encuentro. Y continúo la presentación con el Dúo un Pié. Dos marineros, una hermosa joven y un inocente muchacho, perdidos en algún puerto de algún fantástico mundo. Ella una excelente acróbata y bailarina; Él, un loco soñador que sueña con su amor. Una divertida comedia de circo donde no faltó nada, sólo el beso final.

         Como todos los años, para bajar el telón al 7° Festival de Circo Callejero de Laprida, y tras la entrega de presentes a cada una de las compañías, y a Roque Niklison y a Dolores Ruiz, por parte de funcionarios y concejales, comenzó la gala de cierre, en la que todas las compañías brindaron un número, presentando e intercalando sus trucos de magia, “El gran Jorge”, que les dando el espacio a cada uno de los artistas.

         Y el cierre magistral, a cargo de Niño Costrini. Trajeado de gala, y su cabello electrizado, control remoto en mano, pulsando el botón hacia un aparato imaginario; zapping, señal de interferencia., y el trasfondo de reconocidas voces de la tevé, artistas, fragmentos de pelis, y en sus muecas, morisquetas, contorsión del cuerpo: una ácida crítica a la televisión. Detonó, Costrini, un cerrado y sostenido aluvión de aplausos. Inolvidable.





Nota publicada: 29 de Marzo de 2017

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