Tono Ramos

🕔 07 de Noviembre de 2010

Mi nombre: Juan Antonio Ramos. Nacimiento: 28 de septiembre de 1917 en San Jorge, vecina población de Laprida, provincia de Buenos Aires. Parte de los estudios primarios lo cursé en la Escuela N° 2 de ese lugar; es decir, primero, segundo y mitad de tercero. En 1927 radicado con mi familia en Laprida, cursé hasta terminar tercero, cuarto, quinto y sexto grados en la escuela N° 1. Ejercía el tercer grado la maestra de apellido Fitipaldi; en cuarto Bernardina Tordomar, en quinto Elsa Roche y en sexto María del Carmen Guidoni. Aproximadamente a los 11 años comencé a trabajar, haciéndolo en primer lugar en la mueblería del señor Narciso Garrido, local ubicado en Avenida Pereyra entre Mariano J. Pereyra y Avenida San Martín, local propiedad de la Sociedad Italiana, ocupando ese comercio todo el frente del local y parte posterior para comodidad de la familia. Seis meses después empecé a trabajar en el Diario El Pueblo que funcionaba en una dependencia del actual Hotel Avenida en Avenida Pereyra y Belgrano, para ocupar, posteriormente, el local ubicado a treinta metros de la esquina el local ubicado a treinta metros de la esquina Santamarina entre Rivadavia y Lavalle, donde cesó en sus actividades muchos años en sus actividades muchos años después. En sus talleres aprendí a componer y distribuir, aunque la tarea principal era hacer mandados y limpieza. Director de este diario era el señor Felizardo F. Pereyra y conformaban el personal los tipografistas: Rodríguez, Sánchez, Murúa y un hijo del director llamado Julio. En esa imprenta trabajé tres años, para pasar a la imprenta La Opinión, cuyo director era el señor Bonifacio Díez. Esto ocurría el 15 de diciembre de 1931, desempeñándose en carácter de jefe de taller el señor Lucas María Cruz, familiar del señor Díez. Además trabajaban empleados de apellido Melendi, Castoldi, hermanos Neville. Aquí trabajé hasta el mes de abril de 1976, fecha en que renuncié para ocupar la Secretaría General de Gobierno dela Municipalidad, a solicitud del intendente (de facto) señor Alejandro Servat, designado por el gobierno militar. En el transcurso de los años trabajados en La Opinión, desarrollé tareas en toda la rama de artes gráficas en general: componer, distribuir, imprimir en plana y minerva automática, encuadernar, escribir en la sección deportes y sociales, hasta llegar a jefe de taller, al fallecer el señor Cruz. En 1967 a propuesta del señor José Luis Castro Galván, puse imprenta en mi domicilio de Independencia 1075, fundando el diario La Voz de Laprida, lo que apenas duró nueve meses por desacuerdos con el propietario. Vuelto a La Opinión , los últimos nueve años hasta 1976, trabajé en sociedad con el señor Hugo H. Díez, al frente de la imprenta al fallecer su padre señor Bonifacio Díez. Simultáneamente desempeño la tarea de corresponsal de L.U 10 Radio Azul, de la Ciudad de Azul por espacio de nueve años, renunciando al cargo para pasar a la municipalidad en carácter de secretario. También desde 1958 hasta 1963 actué en carácter de secretario. También desde 1958 hasta 1963 actué en carácter de secretario del H Concejo Deliberante, siendo presidente del mismo el señor Luciano Bastán e intendente el señor Roberto E. Monclá. Formaban el H. Concejo en esa oportunidad, además del señor Bastán, por el Partido Conservador: Roberto Echeverría, Jorge Ugalde, Juan Antonio Larraza, y Rodolfo Espeluse. Por la Unión Cívica Radical: Héctor Clair, Pedro Espil, Nicolás Manzione, y Luis Colantonio. Por la Unión Cívica Radical Intransigente un señor de apellido Mora. (Aníbal) En el año 1952 funcionaba una red de parlantes ubicados en distintos sectores de la planta urbana, empresa denominada Panorama (Publicitario), propiedad del señor Luis Olivera, vecino de Olavarría y posteriormente pasa a manos del señor Hugo Ferreyra casado con Mabel Lozano. En esta empresa tuve a mi cargo un boletín noticioso diario, que salía al aire a las 18.30 horas, siendo locutora la señorita Blanca Guridi. Los domingos pasaba un programa especial con los resultados de los partidos de futbol jugados en la fecha y reportajes a jugadores. También en el campo de deportes de Jorge Newbery, desde la cabina allí instalada al efecto, cada vez que el equipo local salía a la cancha, era encargado de irradiar el tema musical Rapsodia Sueca, con formación de equipos, cambios de jugadores, autores de los goles y otros detalles. En 1936 se formó una Banda Municipal de Música, bajo la dirección del maestro de apellido Melani, ejecutando los instrumentos: clarinete: Jacinto Couchez; requinto: Raúl Tomás; bombardino: Oscar Vallejos; redoblante: Juan Salamagnou; yeni: Anator Emar López; bombo: Casimiro Tomás y yo la trompeta lo mismo que Héctor Etchepare. Cuando me incorporo al Regimiento 5 de Infantería de Bahía Blanca en 1938, me seleccionan para tocar el clarín juntamente con otros doce soldados y así formo parte de la Banda Lisa, que es un anexo de la Banda Principal, actuando en los actos más importantes desarrollados en Bahía Blanca , como así también en Plaza de Mayo de la Capital Federal, en oportunidad de ser convocados para el gran desfile del 9 de Julio de ese año. Al terminar mi función en carácter de soldado, a fines de diciembre, el director de la banda de entonces, me ofrece la dirección de la Banda Lisa y tambor mayor, lo que no acepto, optando por la inmediata licencia o baja definitiva. Durante los años 1939 y 1940 actué de apuntador en el grupo de aficionados al teatro local, desempeñándome en las obras, entre otras, Justicia de Antaño; Jaulas de Oro; Las Vendas Caen; Marianela; Así es la Vida; donde actuaban Juanita Jacquet, Delia Sobrado, Quicha Aguerrebehere, Luis Ottonelo, Alberto Taddei, Jorge Bettini, Miguel Sacerdote, Hugo H. Díez, Chicha Saparrat, Cocola Iribas, Juan Pedro Caminos y en calidad de director Arístides Gutierrez y posteriormente Hugo H. Díez. Hasta 1991 desempeñé simultáneamente las secretarías del Club Atlético Jorge Newbery, Partido Conservador, Asociación Jubilados y Pensionados de Laprida, Filial de River Plate y Agrupación Clase 1917. Además de las ya citadas H. Concejo Deliberante 1958-1963 y Secretario General de Gobierno de la Municipalidad 1976-1981. Practique basquetbol por espacio de 28 años en primera división, siempre con el C.A.Jorge Newbery. El primer equipo que integré se denominaba Academia, camiseta verde con una letra “A” grade en el pecho, integrando además el conjunto, entre otros: Arsenio Fernández Rego y Ángel Canónico. Con el correr de los años y ya cuando los clubes locales tenían sus representativos, juego en Newbery teniendo por uno de los compañeros a Osvaldo Canónico, hijo del nombrado anteriormente. En 1935 se organiza un torneo interno en el Club Jorge Newbery participando del mismo “Academia” (con Próspero, Ramón Quintana, Horacio Melendi, Oscar Martiarena, Enrique Petreli, y el que escribe); “Upaytí” (Héctor Etchepare, Andrés Tuja, Ignacio Minetti, Aníbal Bolttero, Amadeo Silvestri, Anselmo Doartero, Alfredo Devani); “Celestes” (Arturo, Rodolfo, Roberto y Alfredo Bahurlet, Roberto Urruti, Coco Saparrat, Moyano); “Azules” (Cipriano Zapata, Pachín Pereyra –hijo de Mariano N. Pereyra…) (este campeonato fue ganado por Upayti) Cuando se forma la Asociación de Basquetbol de Laprida, los campeonatos se llevan a cabo con la participación del Club Newbery, Lilán, Juventus, y Platense. El presidente de la Asociación señor Venancio Domínguez Muller, director del Diario del Pueblo, en el momento de jugar un partido en cancha de Lilán, año 1960, la Asociación me entrega una medalla de plata cuya inscripción decía: “A la constancia deportiva” por llevar 23 años ininterrumpidos jugando en ese deporte. Seguí en la práctica hasta 1963 o sea cuando ya tenía 46 años de edad, siendo algunos de mis compañeros en la etapa final: José Huici, Aníbal y Benigno Lozada, Alfredo Bernadaz, Néstor Amato, Enrique Méndez, Molinuevo (empleado ferroviario y actual residente en esta ciudad) y Rodriguez a quién le llamaban “El Negro Buenos Aires”. Representado siempre a Newbery, viajé a jugar a Coronel Pringles, De La Garma, Olavarría, Juárez, General La Madrid, Pigue. Inicié la práctica de pelota a paleta en la cancha abierta de Capandeguy, ubicada en la calle Lavalle entre Santamarina y Belgrano, antes de los 18 años, teniendo como maestro a mi hermano mayor Armando. Después solía concurrir a la misma cancha para ya jugar partidos con Reccini (gerente del Banco Nación), doctor Justo Orruma y De Vechi, lo que hacíamos casi todos los días a las 6 de la mañana en tiempo de verano. En 1944 se habilita la nueva cancha de pelota cerrada en el inmueble de la calle Santamarina, actual sede social del Club Newbery, siendo los primeros en hacer uso de la misma: Raúl Bordón, De Vechi, yo y otro que no recuerdo. Intervine en infinidad de campeonatos locales internos, en segunda categoría y otros de intermedia y primera, con algunos triunfos acompañado por Orlando Vignale, Felipe Alonso, Orlando Quinteros y otros que no recuerdo. Cuando tenía cumplidos los 65 años opté por abandonar la práctica de este deporte. En 1941 los señores Hugo H. Díez y Amadeo Silvestri me invitan a integrar la Comisión Directiva del Club Jorge Newbery, lo que acepto, en calidad de vocal titular. En el año 1964 cuando el club resuelve autorizar a una sub-comisión, nombrada al efecto, para proceder a la construcción de la sede social en el inmueble donde se encontraba la cancha de pelota y secretaría, para sus reuniones de la Comisión Directiva que se hacían cada miércoles de semana, ofrezco mi domicilio particular, lo que se acepta, por el transcurso de dos años, sin necesidad de abonar alquiler. Cuando cumplo 25 años como integrante de la Comisión Directiva, esta me otorga una plaqueta en reconocimiento a la colaboración prestada. Sigo en la Comisión en distintos cargos alternativos, actuando de pro-secretario y posteriormente hasta renunciar en 1976 a cargo de la secretaría por espacio de nueve años. En total fueron cuarenta años integrando la Comisión Directiva, colaborando de distintas maneras en la organización de torneos atléticos, competencias de tiro al blanco con carabina calibre 22 auspiciados por la Dirección de Educación Física, primera Maratón de los Barrios con atletas locales y de la zona, festivales de box en la cancha de pelota, etc. Por espacio de veinticinco años me dediqué a la confección de bandas para las reinas de las distintas instituciones locales y de la zona con la inscripción y adornos pintados a mano. Puedo citar a las reinas de que lucieron estas bandas: las representantes del Club Jorge Newbery, Club Atlético Lilán, Club Atlético Platense, Club Social y Deporrtivo Juventud, Club Boca Juniors, Asociación de Bomberos Voluntarios, Institución Tradicionalista Fortín Laprida, Club Atlético San Jorge, Rincón de los Gauchos José Hernández, Club Atlético Juan E. Barra, Auto Moto Náutico Laprida, Aero Club Laprida, Club Social Laprida, Alumnos del Colegio Nacional, Comisión Oficial de Corso, Aniversario de Laprida, etc. En la parte final de esta reseña quiero dejar expresado mi orgullo por haber sido reemplazante del entonces intendente municipal señor Alejandro Servat, mientras duró su licencia anual, oportunidad que me tocó estar al frente del Departamento Ejecutivo en dos ocasiones. Mi padre: Juan Luis Ramos Mi madre: Justa Miranda Mis hermanos: Armando Tomás, Graciela Magdalena R. de Diorio, Elena Celestina R. de Ferri, Raúl Jacinto, Rodolfo Aníbal, Orlando Horacio, Héctor Luis Norma Esther R. de Peruilh Mi esposa: Idolia Esther Diribarne Mi hija: María Teresa R de Dagostino Mi nieta: Aíxa Dagostina Fuente:José Enrique Doartero

Nota publicada: 07 de Noviembre de 2010

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